Bali es una isla con una tradición cultural muy particular. Cuando el islam se propagó por Java, los reinos hinduistas que existían en la isla se refugiaron en Bali, llevando con ellos su religión. Pero también llevaron sus tradiciones, su cultura y costumbres. Éstas son por lo general únicas en Indonesia y, en su mayoría, en el mundo.
El gamelan es un conjunto instrumental consistente en su mayoría de percusiones metálicas (campanas y gongs) que pueden estar acompañadas de flautas de bambú y pequeños tambores. Los instrumentos de un grupo de gamelan están construidos para ser tocados juntos, con una armonía particular, lo que quiere decir que instrumentos de diferentes conjuntos no son intercambiables entre diferentes grupos (es como si estuvieran “desafinados” para otra orquesta).
Al ser en su mayoría tocado con instrumentos de percusión metálicos, hace que sea una música que, de forma natural, tiene una gran reverberación, como si hubiera tenido un trabajo de postproducción donde se le ha añadido eco y reverb. Recuerdo que la primera vez que la oí, en el palacio real de Ubud, me pareció era una música celestial, como de sueño.
Otro tanto ocurre con las danzas en Bali. La cantidad y variedad de estilos de danza de Bali, hace que puedas pasar una semana viendo espectáculos de danza de diferente estilo cada día. Sin duda, el tipo de danza que me resultó más impactante y sobrecogedor fue el Kecak (leído kechak). El Kecak es único pues no tiene instrumentos musicales, todos los sonidos son producidos por los participantes del baile (en forma de chasquidos con la boca y palmas), que en algunos casos puede superar el centenar. El baile representa el mito épico hindú del Ramayana, que dramatiza el eterno conflicto entre el bien (el Dharma) y el mal (Adharma).
La danza puede durar más de una hora, y ver al conjunto de participantes del Kecak cómo están sincronizados entre sí, es sencillamente fascinante.
Otra de las danzas tradicionales es el Legong Kraton, realizada tradicionalmente por tres muchachas jóvenes en uno de los patios del palacio para entretener al rey. Acompañadas de gamelan, es precioso ver el concepto tan diferente de baile al que tenemos en occidente. En este caso, la parte más importante del baile corresponde a los movimientos de manos, los sutiles movimientos de los dedos, y las intrigantes miradas de las muchachas que mueven los ojos (bien abiertos siempre) de un lado a otro.